jueves, 8 de mayo de 2008

La "Festa" o Misterio de Elche

La "Festa" o El Misterio de Elche

Elche es la tercera ciudad en importancia de la Comunidad Valenciana. Pertenece a la comarca valenciano parlante del Bajo Vinalopó, en la provincia de Alicante, y tiene una alta densidad de población: más de doscientos mil habitantes. Con una actividad netamente industrial, centrada en el calzado, la ciudad está vertebrada por el río Vinalopó que separa los barrios modernos de su zona histórica. Los huertos de palmeras son una constante en el paisaje ilicitano, tanto en partes destacadas de su amplio término municipal, como en el casco urbano. Precisamente esta presencia de numerosas palmeras en la propia ciudad y su aprovechamiento tradicional -por ejemplo, en la artesanía de la palma blanca para el Domingo de Ramos- ha hecho que la UNESCO declarara este palmeral parte integrante del Patrimonio de la Humanidad (2000). Esta abundancia de palmeras hace que, históricamente, se haya identificado la ciudad con Jerusalén, el marco de los acontecimientos que se celebran en el Misterio de Elche, la otra gran joya que los ilicitanos han sabido conservar durante más de cinco siglos.


La Festa o Misterio de Elche es una representación de raíces medievales, dividida en dos actos, que se escenifica cada año durante los días 14 y 15 de agosto en el interior de la Basílica de Santa María. En el Misterio se recrea la Muerte, Asunción y Coronación de la Virgen María, la Madre de Jesús, y en su conjunto presenta numerosos aspectos artísticos e históricos dignos de consideración. Es, además, la única obra de su género que se ha mantenido viva hasta la actualidad a pesar de las prohibiciones oficiales derivadas del Concilio de Trento respecto a escenificaciones en el interior de las iglesias, circunstancia que la convierte en una pieza de valor único y excepcional para el estudio del teatro religioso europeo de origen medieval. Así lo reconocía también la UNESCO al declararla en 2001 Obra Maestra -la primera española- del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad.

La acción del Misterio de Elche está basada en los relatos tradicionales acerca de la Asunción de la Virgen María que se transmitieron de manera oral en los primeros años del cristianismo y que, a partir del siglo IV, fueron recopilados en los denominados Evangelios Apócrifos. Estos recogen, precisamente, pasajes de la vida y muerte de Jesucristo y de su Madre que no aparecen en los cuatro Evangelios Canónicos.


Los relatos apócrifos asuncionistas más importantes son los de Juan el Teólogo (siglo IV-V), el Transitus del Pseudo Melitón (siglo VI), la narración de Juan, arzobispo de Tesalónica (siglo VII) y, el más tardío, el relato del Pseudo José de Arimatea (siglo IX-X?), que es el que presenta más puntos de contacto con el Misterio de Elche. Los evangelios apócrifos tienen algunas variantes entre sí y fueron refundidos en el siglo XIII por Jacobo de Varazze en su Leyenda Aurea, conjunto de vidas de santos, que tuvo una gran difusión por toda la Europa medieval y que también influyó en la redacción del drama de Elche.



EL MISTERIO EN 1935

La Mangrana llega
al cadafal
San Juan y San Pedro
ante la María
El apostolado alrededor
del lecho de la Virgen
"Oh, cos sant glorificat" Entrada de los apóstoles
en la segunda jornada
"Flor de virginal bellesa"
La "Judiada" El judío de las
manos "gafas"
Entierro de la Virgen
sobre el cadafal
El Araceli desciende
desde el cielo
La Asunción de la
Virgen en el Araceli
San Pedro saluda
a Santo Tomás al
final del Misterio